Lunes noche, rival asequible, jornada ya disputada... Una vez mas, se vuelven a juntar todos los condicionantes para que el Levante perpetre un nuevo ridículo en el penúltimo partido de la temporada regular en casa. Enfrente estará el ya descendido Ibiza, que ha culminado un fracaso absoluto de temporada, poniendo punto y final a su corta experiencia en el fútbol profesional español.
A Primera RFEF, oé
Tras la derrota en el partido de ida (1-2), el Ibiza cayó en picado. Después de ese partido el conjunto isleño entró en descenso, lo que forzó el cese de Javi Baraja. Su sustituto, Anquela, no ganó ninguno de los cinco partidos que dirigió, y dejó a su marcha una losa clasificatoria que Lucas Alcaraz tampoco consiguió levantar. Y es que esta temporada nada ha salido bien en Ibiza. Nolito, en quien se confiaba la producción ofensiva, ha anotado solo un gol. El jugador total, Coke Andujar, sigue entrenando fenomenal, pero solo ha jugado seis partidos completos en toda la temporada. Como ellos, una larga lista de notas disonantes propiciaron la consumación del descenso hace un par de semanas, tras perder ante el Racing 0-1.
Un dueño noventero
Además de su natural carisma, de Amadeo Salvo podemos destacar muchas otras virtudes. Una de ellas es la paciencia. En sus 8 años al mando ha dejado una ristra de 14 entrenadores y 5 directores deportivos cesados. A lo mejor creía que seguía al cargo del club vecino, donde esto es una práctica habitual. Uno de los entrenadores, David Porras, fue destituido tras una derrota por 0-1 en el primer partido de la temporada.
Otra virtud es la comprensión, ya que su medida para mejorar los resultados esta temporada fue prohibir el suministro de pizzas a la plantilla hasta que no mejorasen, por lo que el pobre Coke Andujar lleva, presuntamente, sin catar una barbacoa desde octubre.
También brilla en la persona de Salvo el respeto a los colegiados, a los que tildó de “golfos” tras perder contra Las Palmas. Por último, destacó su generosidad cuando en enero se negó a ceder Can Misses al CD Ibiza para su partido de Copa. El asunto se complicó dado a que, al ser un estadio municipal, Salvo no tenía potestad para decidir, pero tras abrir una guerra directa con el presidente del CD Ibiza, se salió con la suya, y el partido se marchó a otro estadio.
Drama absoluto
El fútbol vistoso y alegre nunca ha sido el punto fuerte de Lucas Alcaraz, pero en Ibiza no le está saliendo tampoco su natural propuesta defensiva. Hasta ahora son, holgadamente, el equipo que mas tantos ha recibido de la categoría: 65. Además, desde la llegada de Alcaraz solamente han ganado tres partidos más, y el total clasificatorio les deja con solo 29 puntos. Además, los últimos cinco partidos se han transformado para ellos en cinco derrotas, la última por 0-5 contra el Albacete, con el descenso ya consumado. Así pues, el Ibiza no parece ahora mismo el rival a batir del fútbol internacional… claro que el Levante tampoco.
Todos fuera
Pese al descenso, el plan sigue igual en Ibiza. Preparar una plantilla para ascender lo antes posible es ahora mismo el principal objetivo. A pesar de ello, la falta de motivación es el principal lastre a la hora de afrontar los últimos partidos, con un plantilla convulsa ante la reestructuración de vestuario, que ya comenzó en el mercado invernal con la salida de nueve jugadores del equipo, e incluso antes con la rescisión de contrato directa de Miguel Cifuentes y Miguel Ángel Guerrero, ya con el mercado veraniego cerrado. La duda que queda es la continuidad o no de Alcaraz en el banquillo, aunque viendo el historial de Salvo, todo apunta a que las llaves del proyecto de ascenso no serán para el ex entrenador granota.
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