El Levante quiso regalarnos un resumen de la temporada para cerrar el curso en el Ciutat. Estas son las claves del decimonoveno empate de la temporada, el tercero consecutivo.
Apáticos
Siempre hay un escalón más en la decadencia granota. Parecía difícil jugar peor que en las últimas jornadas, pero siempre se puede más. La presión del Alcorcón incapacitó al Levante en salida de balón, con Dela y Cabello imprecisos ante la falta de ayudas. Los encargados de dar vida al juego, Pablo y Oriol, volvieron a moverse a un ritmo ramplón, sin capacidad para dominar el medio, ofrecerse en salida o filtrar pases con peligro. Este Levante no parece un equipo, sino individualidades sueltas que no saben asociarse entre sí. Hemos visto la misma estampa toda la temporada, el único que se mueve es el poseedor del balón, el resto observan. Se salva Carlos Álvarez, indetectable para la defensa.
De Guatemala a Guatepeor
En ataque se evidenció por enésima vez la ausencia de un delantero referencia. Cantero, apático, es un desesperante intento de futbolista profesional, un perfil parecido a Dani Gómez. En los pocos minutos que disfrutó, Rober Ibáñez demostró porqué no juega con más regularidad, y Fabricio sigue sin saber encauzar su habilidad. El deber número uno en este mercado está claro: un delantero. Pero en defensa la cosa tampoco mejora demasiado. El Alcorcón encontró en cualquier internada una ocasión clara ante una zaga débil y tibia. Los alfareros anotaron dos goles, dieron otros dos largueros y sufrieron a Andrés Fernández. El “Alcor”, sin necesidad de dormir tanto el partido, mereció ganar en el Ciutat.
Presente y futuro
El Levante encarriló el partido en cinco minutos de lucidez. Primero fue Andrés García, de solo 21 años, el que adelantó a los granotas. Cinco minutos después apareció Carlos Espí, quien solo tardó cuatro minutos en hacer su primer gol en el Ciutat. Todo ello con Jorge Cabello como titular por cuarto partido consecutivo. En este tétrico Levante nuestra gran esperanza es la cantera. Una cantera que más que una promesa ya es una realidad. Sea quien sea el entrenador la próxima campaña, esperemos que cuide nuestro mayor valor.
Levante Unión Depresiva
En tres años el Levante ha pasado de jugar en Primera a convertirse en un equipo sin entrenador ni idea de juego. Un grupo de chavales jóvenes a los que, pese a no dar el nivel, da hasta lástima silbar. “El equipo necesita madurez”, sí, y otras muchas cosas. Cabe destacar las últimas jugadas del partido a balón parado, donde apenas subieron a rematar 3 futbolistas del Levante mientras el resto defendían. Una lástima. El Levante, como plantilla e institución, sigue en una dinámica decadente que difícilmente se revertirá el curso que viene.
M.V.P: CARLOS ÁLVAREZ | CESIÓN: CANTERO | VAYA DÍA: PABLO MARTÍNEZ |
La nota más positiva de la temporada | No da el nivel. | Partido indecente. |
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